Cuando se reactivó el conflicto en la Franja de Gaza, la solución final fue poner a gatos paseando por esa zona. Por el rumor ese sobre que absorben energías negativas, ¿qué se pierde? Y ganaron todos. Se alcanzó la paz. De paso, árabes y judíos quemaron esos libros antiguos que solo recuerdan una enemistad heredada. Desde entonces se oficializó al gato, internacionalmente, como algo sagrado. Por lo menos debe haber uno en cada casa, y en los estadios y en el Congreso. Que los gatos se encarguen del control humano. Y el mundo volvió a ser de ellos, como siempre.
Ojalá. Porque esas guerras enquistadas no hay Dios que las acabe.
ResponderEliminarUn abrazo
Que sería de nosotros sin la inmensa sabiduria de los gatos...
ResponderEliminarMi apoyo para los gatos como dirigentes de la humanidad... incluso los perros y los pájaros, o las cabras y los monos.
ResponderEliminarMenos los humanos, cualquiera.
Siguen mandando.
ResponderEliminarUn abrazo.
Qué sería del mundo sin religiones y sin gilipollas que las hacen imperecederas.
ResponderEliminarEso dicen de ellos, jajaja. Yo les tengo cierta antipatía por herencia materna.
ResponderEliminarAbrazos amigo.
Gatos al poder si es que gracias a ellos se acaban los conflictos que empiezan los homínidos de la especie imbecilus.
ResponderEliminarAbrazo.
ResponderEliminarMi gato Lucas dice que está totalmente de acuerdo. Y yo también, pero es un secreto, no se lo digas.
ResponderEliminarMe gusta el texto y la idea.
Un abrazo
De ahí viene ese aire de superioridad que tienen los gatos, ahora lo entiendo.
ResponderEliminarVa un beso.
¿Puede ser un gato de cualquier color o preferiblemente negro?
ResponderEliminarUn abrazo.
Da igual, pues de noche, al final, todos los gatos son negros.
EliminarUn abrazo psicológico.
que maravilla de cuento....
ResponderEliminarPaz
Isaac
A ver si llegan esos gatos, ese conflicto será eterno salvo que comiencen a reconocerse su existencia y acepten que deberán convivir. Vida o muerte, ellos eligen. Un abrazo!
ResponderEliminarSí sería una realidad ideal tu hermoso y gatuno cuento, Julio, porque cada cuatro o cinco años los israelitas destruyen la franja de Gaza, lástima que no los libros esos de los que habla.
ResponderEliminarImagino que con la esperanza que los palestinos pasen cuatro años más reconstruyendo su estado-trampa y su dolor y no tengan tiempo ni ánimo de lanzar piedras o cohetes....
Sería surrealista, si no fuera tan doloroso. Añadido a la indiferencia internacional más absoluta.
Un abrazo,
Gatitos y sus mascotas humanas.
ResponderEliminar:)
Besos.
Los egipcios la tuvieron clara desde el comienzo, pero no queríamos creerles!
ResponderEliminarFeliz que nos gobierne un gato, creo que lo haría mejor que el actual presidente, o no????
ResponderEliminarAbrazos
Si he de elegir, por lo menos me gustaría ser gobernado por alguien que se vea adorable. Excepto Kim jung-un: no hay un ser con alma tras esos cachetitos regordetes.
EliminarUn abrazo psicológico.
En el Coran no hay ninguna enemistad con los hebreos. Es más, se dice que hay que respetar a las "religiones del libro", es decir, a las religiones que reconocen el Antiguo Testamento, como los cristianos y hebreos.
ResponderEliminarPero después todo se desvirtuó.
Esto significa: No culpemos a los libros, sino a sus intérpretes.
Ya ha habido demasiadas bibliotecas incendiadas como para que ocurra otra vez.
Saludos,
J.
Aquí van a cambiar los leones de las Cortes por gatos, pero no sé cuándo..
ResponderEliminarSaludoss
No hay como abrir la puerta de la imaginación, para que la imaginación comente.
ResponderEliminarAbrazos Julio.
Pues no estaría nada mal , ya que nuestro
ResponderEliminarGobierno , gobierna con el culo, así que yo prefiero que gobierne un gato listo que no estos zoquetes. Un saludo de flor la del baúl de mis libros y juguetes.
MICHIS POWER, ¿Dónde firmo?
ResponderEliminarYo pongo tres gatos ordenados, limpios, silenciosos, pacíficos tal como el mundo debe ser.
ResponderEliminarSaludillos
Ojalá funcionase! Genial microrrelato.
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