Aunque recién empieza la jornada, las heridas de ayer ya cicatrizan. Esto mantiene a los individuos pensativos, volcados a su interior. Por este motivo este día reina mayormente el silencio y es mal visto que eleves mucho la voz, aunque sea para expresar felicidad. En lo posible evita las emociones fuertes aun si estas son positivas. Es que el miércoles es una etapa de transición que se administra con sosiego.
Y para antes del anochecer, las personas ya deberán tener bien aprendidas las disculpas que serán ofrecidas mañana entre los que sobrevivieron al odio y a la destrucción del martes.
Un día de miércoles, diría mi abuela.
ResponderEliminarSupongo que luego del luto vendrá un jueves más festivo.
Saludos.
Como si no hubiera presente. No me gustan las transiciones.
ResponderEliminarSaludos.
El miércoles representa el paso del ecuador. El jueves ya viene cuesta abajo y todo resulta más placentero.
ResponderEliminarUn miércoles en mitad del camino.
ResponderEliminarFeliz día.
Besos.
Con razón dicen que el miércoles está en medio, como la yema del huevo. ¡Menuda semana nos estás descubriendo, tocayo! :)
ResponderEliminarSaludos.
cada vez más cerca el fin de semana
ResponderEliminarLos miércoles molan. Son el ecuador de la semana y ya vamos notando el finde cerquita. Besotes!!
ResponderEliminarPero a veces las disculpas son poca cosa ante tanta destrucción.
ResponderEliminarAcá el miércoles es más barato el cine.
Abrazos
Me quedo con eso de que está mal visto alzar la voz aunque sea para mostrar felicidad.
ResponderEliminarUn beso