ARCANO MAYOR: El mundo
El universo tiene 14 mil millones de años. Y continúa
expandiéndose más rápido que la velocidad de la luz en todas direcciones, por la
energía oscura. Nuestra galaxia, la Vía Láctea, tiene 13,21 mil millones de
años. La estrella más antigua contenida en ella, 13,2 mil millones de años. El
sol, tiene 5 mil millones de años. La Tierra, 4500 millones de años. Los
dinosaurios reinaron este mundo 160 millones de años antes de extinguirse. El
árbol más viejo, 9550 años. Comparado con estas cifras colosales, yo soy joven:
no me trates de “usted” ni de "señor". ¡¿Entendiste, mocoso ignorante?!
Efecticamente, deberían ser curas de humildad para nuestra prepotencia.
ResponderEliminarSaludos.
Un beso para ti, jovencito !
ResponderEliminarGracias por lo de jovencito, eterna jovencita.
EliminarUn abrazo psicológico.
Como quien dice, acabamos de nacer. Y al morir continuamos siendo niños. Quizá es que la vida es demasiado corta para aprender.
ResponderEliminarUn abrazo.
Como decimos por estos lados: no somos nada...
ResponderEliminarUn abrazo y sé más respetuoso con los mayores, Julio (jeje).
La verdad es que cuando pienso esas cosas me siento de lo más insignificante. Besotes!!!
ResponderEliminarEstás hecho un crío. Un saludo
ResponderEliminarA esas escalas de tiempo, nuestras vidas no son más que una mota del polvo... Tan importantes que nos creemos y lo poco que contamos.
ResponderEliminarUn micro curioso, tocayo. Folosofía de vida extraída de los números :)
¡Un abrazo!
Lo entendí. Señor!
ResponderEliminarUn abrazo.
Ay sí, bien por lo que dices, Julio D. No hay nada que odie más que ese "Usted", ¡si somos unos chiquillos, comparado con esos millones de años!
ResponderEliminarUn beso
Intento entenderlo, jovencito.
ResponderEliminarUn beso .
No somos nada... Eso esta cada vez mas claro...
ResponderEliminarUn abrazo
No se me había ocurrido utilizar esta "unidad de medida" para relativizar ese hacerme mayor sin delicadeza, pero es genial.
ResponderEliminarAdemás de añadir que todos los crujidos que siento cuando me levanto de la cama no se debe a que este viejita sino a que estoy crujiente.
Y el que no se conforma es porque no se ha parado a pensar lo poco que somos comparados con la inmensidad del Universo.
Ese giro final estuvo regio.
Un beso,
Y nos hablan del fin del mundo. Ni de lejos lo vamos a ver. Y es verdad, ya ni los viejos se consideran viejos. Y hay que admitirlo, hay personas de ochenta años que están realmente increíbles. Aunque el no tutear es más por respeto que por edad, ¿no?
ResponderEliminarSaludos.
¡Entendí entendí! :))) No en vano soy ese “mocoso e insolente joven”…
ResponderEliminarLas cifras que das son cósmicas! :))) No se yo si la mente humana está preparada para tanta distancia, datos y tiempo…
Claro que también pudiese suceder que no hubiese tales “distancias y tiempos”. Y todo se redujese a un simple presente que todo lo contiene. Y ahí sí también la mente humana se encontraría algo limitada… Por falta de “aceptación” más que de comprensión!
Abrazos, Julio.
Los datos producen vértigo pero lo que no cambia es que para un jovenzuelo, "educado" como es el de tu micro, todos los que no sean de su edad ya son viejos y por tanto señores jajaja
ResponderEliminarEl respeto no sabe de tiempo. La educación es un valor eterno.
ResponderEliminarSaludos